El Ministerio de Finanzas Públicas informa que el cierre de las cuentas fiscales 2013 se concluyó en orden y con resultados que evidencian la eficiente y acertada gestión de la política fiscal. El déficit se situó en 2.2% del PIB, nivel que propicia la estabilidad macroeconómica y el desarrollo de la economía. El retraso en la aprobación de los préstamos de apoyo presupuestario y el comportamiento de los ingresos tributarios constituyeron adversidades que fueron adecuadamente solventadas.
La carga tributaria en 2013 se situó en 10.9%, resultado de una recaudación tributaria de Q46,306.1 millones, que representa un crecimiento interanual del 8.1%, superior al observado en 2012 (6.3%), a pesar de la serie de acciones de inconstitucionalidad en contra de la Ley de Actualización Tributaria. Este crecimiento se asoció principalmente al ISR, el cual creció en 20.6% respecto de lo recaudado en 2012. Por su parte, el gasto público creció interanualmente en 5.3%, situándose en 13.7% del PIB, cifra menor que el observado en 2012 (14.1%).
Adicionalmente, y por segundo año consecutivo, se realizó una efectiva gestión financiera de la deuda pública, iniciando con la temprana colocación (febrero) del total autorizado de bonos, la mayor parte en el mercado internacional (US$ 700 millones), con un mejor plazo y tasa de interés. Esta gestión facilitó el financiamiento del gasto público. Asimismo, con el desembolso del préstamo proveniente del Banco Mundial al final de noviembre, y los del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo –BID– en diciembre, también se contribuyó al ordenado cierre de las cuentas fiscales de 2013. Como resultado de estas operaciones, el saldo de la deuda pública se situó en 24.7% del PIB, levemente por arriba del registrado en 2012 (24.6% del PIB).
En cuanto a la no aprobación del Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado para el Ejercicio Fiscal 2014, queda al Ministerio de Finanzas Públicas afrontar una serie de desafíos, en particular, continuar con el proceso de consolidación fiscal, aumentar la recaudación tributaria mediante el apoyo institucional a la SAT, garantizar el financiamiento del servicio de la deuda pública, optimizar las operaciones de crédito público tales como la emisión de Bonos del Tesoro y la reprogramación, para dar cabida a nuevos préstamos. Adicionalmente, honrar los Pactos Colectivos con el magisterio nacional y el Ministerio de Salud.
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